Por esta casa nos hemos pasado todo el mes de septiembre haciendo mermeladas, salsa de tomate y muchas recetas con verduras. Y es que la huerta en verano es espectacular. Hoy le ha tocado el turno a una cidra que me habían regalado. No hace mucho que me enteré de que el cabello de ángel se hace con una calabaza concreta, cuya pulpa es blanca y que se llama cidra. Así que esta tarde me puse manos a la obra. Había leído varias cosas y no las tenía todas conmigo de conseguir el cabello de ángel, porque el proceso me parecía complejo.
Finalmente, ha sido mucho más sencillo de lo esperado y hemos obtenido poco pero muy rico.
La verdad es que estoy disfrutando mucho en y con la cocina: apreciando el trabajo, aprovechando más los alimentos, aprendiendo nuevos procedimientos, saboreando nuevos gustos, ofreciendo otras formas de comer hortalizas... Ya me estoy imaginando las empanadillas de cabello de ángel que haré uno de estos días...