Los viernes nos juntamos los amigos en el local para cenar juntos. Cada uno lleva algo de comer y pasamos un buen rato. Es un día para mi especial: Me gusta preparar algo pensando en los amigos, en el buen rato que vamos a pasar juntos, charlando, comiendo, jugueteando con los niños... El viernes pasado preparé estas galletas de canela (muy fáciles de hacer porque no había que esperar unas horas con la masa en el frigorífico, sino que se hacían directamente en el horno). Parece ser que estaban más ricas que el aspecto que dan (homenaje a las bromas de Nano, que al verlas hizo referencia a los filetes rusos). Ya veremos a ver qué preparo para este viernes, pero igual me atrevo con algo dulce de nuevo. ¡Hay que endulzarse la vida!